Ayuntamiento de Santander

AL PLENO DEL AYUNTAMIENTO DE SANTANDER

   Don. MIGUEL SARO DÍAZ, concejal de UNIDAS POR SANTANDER y del Grupo Mixto en el Ayuntamiento de Santander, al amparo de lo dispuesto en el artículo 45 del Reglamento Orgánico del Pleno, la MOCIÓN que se expresa al final de este escrito, fundada en lo siguiente:

   I.- En el cementerio de civil de Ciriego existe un Memorial por los republicanos fusilados contra las tapias de dicho cementerio durante la represión posterior a la ocupación de la ciudad por los fascistas y resto de alzados en agosto de 1937. Todos ellos, más entre 850 y 1000, fueron enterrados en fosas comunes entre los años de 1937 y 1948. Para recordar a estas víctimas la "Asociación Héroes de la República y la Libertad" colocó un trilito en forma de dolmen rematado por unas manos y cadenas de hierro del escultor Jesús Otero en 1980 tras una suscripción popular. La identificación de las víctimas represaliadas que reposan en las fosas comunes ha sido posible solo gracias a la labor investigadora de Antonio Ontañón Toca y al estudio de los internos de la prisión que eran conducidos a su fusilamiento en las tapias del cementerio, debido a la práctica del capellán del cementerio en aquella época, Tomás Soto Pidal, de no reflejar los nombre de los fusilados en el registro del cementerio, intentando asegurarse de esta forma el silencio y el olvido sobre las víctimas.

   Existe también un monolito con una alegoría a la Segunda República española sobre una placa cerámica, representada por una mujer y un león con la bandera tricolor de fondo impresa desde 2001 en el citado memorial junto a nueve monolitos que recogen el listado de los fallecidos identificados y enterrados bajo estos en las fosas comunes, siendo el décimo dicha alegoría de la República.

   Dicha placa ha sido vandalizada a comienzos de año sin que se conozca la identidad de los autores y con pocas esperanzas de localizarlos debido a la disposición de las cámaras de seguridad del cementerio, gestionado por la sociedad mixta ‘Cementerio Jardín de Cantabria SA’. Los daños sobre la imagen se aprecian a simple vista sobre todo en el rostro de la mujer que encarna a la República y en del león, que tras lo ocurrido presentan grietas provocadas por el impacto de objetos contundentes. Algunos de los elementos del Memorial han sido vandalizados en otras ocasiones: la placa explicativa que hay entre los dos monolitos principales la han arrancado dos veces.

   Las cámaras de seguridad que vigilan el cementerio no han captado nada que haya permitido identificar a los causantes del daño debido a que su disposición no garantiza la seguridad del espacio.

   II.- La Ley 20/2022, de 19 de octubre, de Memoria Democrática establece medidas de reconocimiento de las víctimas de la represión, obligando a las administraciones a establecer medidas y actuaciones necesarias para el conocimiento y conmemoración de los hechos representativos de la memoria democrática y el reconocimiento de las personas que lucharon por la libertad y la democracia, especialmente de todas las víctimas, especialmente donde se encuentren sus restos. La más reciente Ley 8/2021, de 17 de noviembre, de Memoria Histórica y Democrática de Cantabria establece también concretas obligaciones de conservación e identificación a los lugares de Memoria Histórica y Democrática de Cantabria, espacios en los que hayan sucedido hechos de singular relevancia histórica o especialmente simbólicos por su repercusión en la memoria colectiva.

   Es obligación de los poderes públicos actuar conforme al dictado de las señaladas normas, asegurando la conservación del espacio donde reposan los restos de más de 1000 fusilados por la represión franquista, asegurando que la memoria de las víctimas no desparezca, y evitando la vandalización pro aquellos que se identifican con el papel de los victimarios y asesinos.

   El artículo 20 de la misma norma crea el Inventario de Lugares y Sendas de Memoria Historia y Democrática de Cantabria al objeto de incluir en él aquellos espacios, inmuebles o parajes en el que hayan sucedido hechos de singular relevancia histórica o especialmente simbólicos por su repercusión en la memoria colectiva relacionados con la represión o de la violencia política o como consecuencia de ellas, durante el período que abarca desde el inicio de la guerra civil hasta la entrada en vigor de la Constitución Española de 1978. La formación, conservación y divulgación de dicho Inventario corresponde a la Consejería competente en materia de memoria histórica y democrática.