Ayuntamiento de Santander


Moción - Denominación calle César de la Campa Alba

6 Mayo 2022

AL PLENO DEL AYUNTAMIENTO DE SANTANDER

 

   Don. MIGUEL SARO DÍAZ, concejal de UNIDAS POR SANTANDER y del Grupo Mixto en el Ayuntamiento de Santander, al amparo de lo dispuesto en el artículo 45 del Reglamento Orgánico del Pleno, la MOCIÓN que se expresa al final de este escrito, fundada en lo siguiente:

   I.- César de la Campa Alba nació el 13 de febrero de 1932 en Riva de Ruesga, hijo de panadero y maestra, cuarto de cinco hermanos. Se ordenó sacerdote, en el Seminario de Corbán donde ingreso a estudiar a la edad de 11 años, siendo sus primeros destinos como coadjuntor en Vega de Pas y Barreda, y a la parroquia de la Anunciación en Santander. A César siempre le gustó trabajar con los jóvenes, y desde el inicio de su actividad participó en la Juventud Obrera Cristiana y con los grupos scout.

   En el año 1976, fue trasladado a una parroquia nueva en un nuevo barrio que ni siquiera tenía iglesia, que se ubicaría con el tiempo en un bajo de uno de los bloques más céntricos dentro del barrio la Colonia de los Pinares. Inicialmente oficiaba las misas en el salón de teatro y biblioteca del Barrio de los pinares llamado Centro Cultural Pintor Riancho, y en poco tiempo montó su Iglesia, un grupo scout, una biblioteca, un taller de fotografía, otro de música, un foro de opinión, grupos literarios, impartiendo además clases de religión católica en el Instituto Villajunco.

   Desde su posición como cura César se convirtió en un auténtico pilar del barrio Los Pinares, implicándose en el desarrollo de todos sus vecinos, especialmente aquellos que pasaban por más dificultades. Favoreció la participación de sus vecinos social y políticamente a través de movimientos asociativos buscando la mejora de las condiciones de vida de la gente del barrio, desarrollando una labor de inclusión social para los más desfavorecidos del barrio a través de procesos de formación permanente como el aula ‘Los Incas’, trabajando con todo el barrio para fomentar valores de convivencia y promoviendo valores de equidad, respeto y tolerancia.

   Entre sus acciones entre los jóvenes, César diferenciaba dos facetas interrelacionadas fundadas en el voluntariado y el asociacionismo juvenil: “Educación para la vida”, y “Actuación ante situaciones de desventaja”. En este ámbito, el cura desarrolló una extensa red asociativa juvenil a través del grupo scout realizando con enorme esfuerzo campamentos juveniles en Liébana y en otros puntos de las montañas cantábricas e incluso en Pirineos, donde aprovechaba para favorecer la integración de niños en posible exclusión social.

   César realizó un gran trabajo social en el barrio involucrándose con jóvenes toxicómanos con los pocos medios que tenía a su alcance, ayudándoles económicamente e integrándoles a través de la vida asociativa y deportiva del barrio que él ayudaba a fomentar, y distribuyendo alimentos desde su casa a través del Banco de Alimentos de Cantabria, Caritas y Cruz Roja, o bien pagando recibos de suministros básicos de muchas familias. También se ocupaba de los mayores organizando actividades para motivarles a salir de sus casas organizando distintas actividades con ayuda de voluntarios y organizaba con los jóvenes las fiestas del barrio.

   Al final de su vida se retiró a la residencia de Corbán, donde falleció el año 2015.

   II.- El año 2020, un grupo promotor presentó una propuesta para designar con el nombre de César de la Campa una calle y plaza del Grupo Los Pinares, justo aquella que da entrada al local donde se encuentra la parroquia en la que trabajaba César. Dicha propuesta fue acompañada de 1180 firmas de vecinos de Santander, la mayor parte vecinos del Grupo Los Pinares. El vial no tiene nombre distinto de la numeración correspondiente al propio Grupo Los Pinares.

   Desde dicha fecha el expediente no ha avanzado, aduciendo reparos por parte de los servicios técnicos municipales. La propuesta trata de reflejar en el callejero, como recuerdo y mención honorífica, a una de las personas alrededor de las cuáles creció y se desarrolló el Grupo Los Pinares, no solo como desarrollo urbanístico sino como proyecto social de integración.

   César de la Campa fue uno de los muchos que trabajaron, como otros curas de su época, en la búsqueda del ‘hombre nuevo’ en las sociedades modernas, trabajando a su alrededor para crear comunidad alrededor del respeto y la igualdad. Por eso cientos de sus vecinos le recuerdan y desean homenajearle dejando su recuerdo en la nomenclatura del barrio que ayudó a crear, no en lo urbanístico sino en lo humano.

   El artículo 24.2.b) del Reglamento de Honores y Distinciones de la ciudad de Santander expresa que los criterios preferenciales para otorgar nombres serán los siguientes, por el orden en que se citan: (…) b) Dar prevalencia a nombres vinculados con nuestra ciudad o región, sin excluir algunos de muy señalada relevancia universal.

   Resulta evidente que en el Grupo Los Pinares casi todos recuerdan al cura César, persona que ayudó al desarrollo del barrio durante 50 años.

   Por lo expuesto, el concejal que suscribe presenta la presente MOCIÓN por la cual insta a la alcaldesa de Santander a:

  • Iniciar los trabajos e informes para llevar a la próxima comisión de cultura una propuesta para denominar calle César de la Campa Alba (Cura) al vial que figura en la solicitud presentada por los vecinos del Grupo Los Pinares, según la cartografía que acompaña a esta moción.

 

* Se aprueba la propuesta junto al punto nº 31 del Orden del día.